Existen muchas creencias erróneas y mitos en torno a la salud bucal, y uno de los más comunes es pensar que la pérdida de dientes es algo normal e inevitable. Muchas personas asumen que, debido al proceso natural de envejecimiento, perder una o varias piezas dentales es algo inherente al paso del tiempo. Sin embargo, esto no es necesariamente cierto. La realidad es que existen medidas de autocuidado que pueden ayudar a prevenir el deterioro de nuestra dentadura y mantener una sonrisa saludable durante toda nuestra vida.
La importancia de la prevención
Una adecuada higiene bucal y revisiones periódicas con el dentista son fundamentales para cuidar nuestra dentadura y evitar problemas mayores. Algunas sencillas acciones de autocuidado que nos permitirán mantener nuestros dientes sanos son las siguientes:
1. Cepillado: Es fundamental cepillarse los dientes al menos dos veces al día durante aproximadamente dos minutos. El cepillo debe contar con cerdas suaves para no dañar ni el esmalte dental ni las encías. Recuerda cambiarlo cada tres meses aproximadamente o cuando observes que las cerdas estén muy desgastadas.
2. Uso del hilo dental: El hilo dental debe utilizarse diariamente, no solo cuando sientas molestias o tengas resistencias entre los dientes. Está demostrado que el uso del hilo dental ayuda a eliminar restos de alimentos y bacterias entre las piezas dentales, evitando así la formación de caries y enfermedades periodontales.
3. Enjuague bucal: El enjuague bucal desinfectante puede ser utilizado después del cepillado como complemento a la limpieza oral diaria. Su principal función es actuar como antiséptico en la boca, eliminando microorganismos nocivos que puedan provocar mal aliento y enfermedades periodontales.
4. Visitar al dentista regularmente: Es fundamental acudir al menos una vez al año al odontólogo para realizarse una revisión completa. Además, cuando detectemos alguna molestia, debemos acudir inmediatamente al especialista para evitar complicaciones futuras.
Factores de riesgo
Existen ciertos factores de riesgo asociados a problemas bucales como caries o enfermedades periodontales. Estos pueden aumentar la probabilidad de perder dientes si no se tratan a tiempo. Algunos de estos factores son:
– Consumo excesivo de azúcar
– Fumar
– Consumo excesivo de alcohol
– Diabetes
– Estrés
Manteniendo una alimentación equilibrada, reduciendo o eliminando el consumo de tabaco y alcohol, controlando enfermedades sistémicas como la diabetes y llevando una vida activa y libre de estrés, podemos disminuir considerablemente estos riesgos y cuidar mejor nuestra salud bucal.
Cuidar nuestros dientes es indispensable para mantener una buena calidad de vida en todos los ámbitos. A pesar del mito popular que asegura que perder piezas dentales es algo normal e inevitable a medida que envejecemos, lo cierto es que con un adecuado autocuidado podremos prevenir el deterioro e incluso disfrutar de una dentadura sana durante toda nuestra vida.
El primer paso para desmantelar este mito consiste en tomar conciencia sobre la importancia del mantenimiento y prevención en nuestra salud bucal. No esperes a tener problemas dentales para cuidar tus dientes; poner en práctica medidas básicas desde hoy te permitirá gozar mañana de una sonrisa sana y feliz.